miércoles, 31 de diciembre de 2014

mi tortuga estaba ahogándose en el jardín

Este es mi piyama de los 7 años, es de invierno. Mi cama esta junto a la ventana del jardín; nunca pude dormir con la cortinas cerradas, todo los monstruos se esconden detrás. Todos duermen, pero yo no, tengo que vigilar. La luna entra por la ventana, hasta la funda de mi almohada. A veces hablo con las estrellas. Esa noche no, porque había tormenta, "alerta meteorológica" había dicho mi abuela. Las plantas se agitaban por el viento, yo estaba cuidando el jardín, cuando empezó la lluvia y el viento. Entonces la vi; mi tortuga cruzaba el jardín, con su caparazón, con su herida de cortadora de pasto sobre su caparazón. A veces la olvidaba por completo. Ahora estaba ahí, abajo del agua torrencial. Cada tanto los relámpagos iluminaban todo, y creí verla sonreír. Bajaba la cabeza y tomaba agua del suelo. Sabia que a veces, el jardín se inundaba por la lluvia, tuve miedo de que se ahogue. Así que me quede toda la noche despierto, cuidándola, listo para salir al jardín bajo el agua y salvarla. Cuando dejo de llover, me dormí.